A lo largo de estas ultimas semanas se han sucedido en diversos medios de comunicación noticias acerca de EITB. Pese a la imperiosa necesidad de un debate acerca del carácter, modelo y objetivos de un ente estratégico para el país como debería de ser EITB, dichas noticias se han referido a las personas propuestas por una u otra formación política para ocupar los diversos (y numerosos) cargos del ente público, así como la admisión a trámite de una denuncia por malversación de capitales públicos.
Lo primero que quiero destacar en este post está relacionado con las negociaciones entre PNV y PSE para consensuar el reparto de puestos. Pese a la insistente oferta y llamamiento de EH Bildu para debatir acerca del modelo y carácter de EITB, el PNV, haciendo gala de su falta de perspectiva estratégica y su reducida visión de país, ha vuelto a rehuir el debate para centrarse en aquello que de verdad maneja y le interesa: el pasteleo y la negociación, no sobre contenidos, sino sobre puestos y cargos.
Un necesitado PSE acudió raudo y veloz a la condicionada mesa de negociación planteada por el PNV. A cambio de ciertas garantías para aquellas personas instaladas en EITB por el ejecutivo de Patxi López, y tras montar un numerito mediante el cual desde Sabin Etxea quisieron trasladar toda la responsabilidad de la falta de acuerdo a EH Bildu, PNV y PSE firmaron un rápido y exiguo acuerdo, acordando que fuese Mikel Agirre el próximo director general de EITB.
Así pues, se juntaron las ganas de comer del PNV con el hambre del PSE y volviendo a postergar el debate acerca del modelo, hemos vivido una escenificación del tan habitual cambio de cromos.
La segunda idea esta relacionada con las noticias que han sacudido los informativos de esta semana: el martes Mikel Agirre presentaba su renuncia al cargo de director de EITB. La persona asignada por el PNV para dicho cargo renunciaba aduciendo motivos personales. Esta falta de concreción dio paso a la especulación acerca de la motivación real de dicha renuncia.
Y, casualidades de la vida, ese mismo día se filtraba en los medios de comunicación la admisión a trámite de una querella presentada por LAB contra Juan Diego, ex-gerente de EITB. En esa querella se recoge que la sociedad privada Vilau Media SL, entre cuyos socios constituyentes figuran Juan Diego, el propio Mikel Agirre y el actual presidente del PNV, Andoni Ortuzar, recibió un préstamo de 700.000 euros de BBK avalados por EITB. Una cantidad de dinero de la que, como ya sabréis, se ha tenido que hacer cargo EITB, una entidad pública. Es decir, estamos ante un nuevo caso de promoción de intereses privados a través de capitales públicos.
Este nuevo chanchullo de los "buenos gestores" de lo público, no hace sino evidenciar que un debate en profundidad acerca de EITB es de total urgencia. Considero que es imprescindible reflexionar acerca de lo que es y tiene que ser EITB en la Euskal Herria del siglo XXI; acerca de la función vertebradora territorial y social, del papel que ha de cumplir como medio de comunicación público, de su labor en la promoción del euskara ; del modelo de dirección y funcionamiento, del necesario control público y social, de como alejarse del modelo de empresa especulativa; del rol, función y papel que los profesionales y trabajadores del ente han de tener... En definitiva, de como afrontamos en medio de los grandes cambios que se están dando en el campo de los medios audiovisuales, un debate estratégico que garantice también en este campo un servicio público de calidad .
Sin ninguna duda, no solo estamos dispuestos al debate, sino que vamos a trabajar para que cuanto antes este debate se convierta en realidad.
http://sortu.net/eu/blogak/joseba-permach/167-debate-estrategico-o-cambi...