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Ahora le toca el turno a EiTB

Y a sabía yo que, al final, terminarían por confesar sus avisesas intenciones envueltas en palabras com0 «sensatez», «pragmatismo» o «redimensionamiento». Es lo que trae de la mano el Gobierno «del cambio» en la CAV.

El domingo, el editorialista de «El Correo Español» abría pieza reconociendo la caída en picado de las audiencias de EiTB y atribuía el hecho a «la contestación de que ha sido objeto desde las filas nacionalistas». Como si la birria de programas-estrella que se han sacado de la manga no tuviera que ver con la huida de los televidentes.

Hay más factores que reconoce el escriba: «Junto a la segmentación de la oferta televisiva gracias a la TDT, ETB está siendo afectada por la ineludible caducidad del modelo televisivo tradicional, y no sólo por las dificultades que encuentra para ofrecer una programación atractiva».

Ya ha colocado las piezas del trampolín para dar el salto a lo que, en realidad, quiere plantear. Lean, lean.

Advierte que «si hacer una televisión capaz de atraer la atención de una amplia audiencia resulta sumamente difícil en un tiempo en el que la información y el entretenimiento encuentran un abanico creciente de cauces de transmisión y participación, las instituciones están obligadas a replantearse muy seriamente su sentido en tanto que servicio de titularidad pública». Ven por donde va el tío, ¿verdad?

Lamentaría el de «El Correo Español» que «el Gobierno de López y el conjunto de las fuerzas parlamentarias asumieran la existencia del ente público como una herencia a mantener sin más». Lo dice desde la convicción de que «cada día que pasa se acumulan los motivos que invitan a redimensionar EITB». Lo que en realidad viene a plantear es que EiTB deje de ser pública. No se equivoquen.

Y lo deja más claro al final de la pieza: «El hecho de que el ente esté aplicando sobre su presupuesto inicial el ajuste al que han de comprometerse todas las administraciones y sociedades públicas tampoco debería eludir la urgente reflexión que las instituciones han de afrontar sobre su futuro en un escenario mediático cambiante que puede llegar a poner a prueba su viabilidad». ¡Ya sabía yo que se querían cargar EiTB!

Maite SOROA | msoroa@gara .net
GARA 2010.06.15

Hona hemen DEIA eta EL CORREO egunkariek Surioren taldea EITBn daraman lehen urtehurrenean argitaratu dituzten publi-erreportaiak.

Espero denez, DEIAk egurra ematen dion bitartean, Surio politika korrespontsal izan den EL CORREO egunkariak laudorio eta errekonozimendu baino ez du.

· En la plantilla se ha extendido la creencia de que los nacionalistas volverán al poder y que pasarán factura a quienes ahora colaboren con el equipo de Alberto Surio

· La pérdida de audiencia y el pulso que mantiene un sector de la plantilla cercano al PNV marcan el primer año de los nuevos gestores del ente público

EiTB es el verdadero toro al que se tiene que enfrentar 'el cambio' en estos cuatro años. Es el reto más difícil de la legislatura». La frase corresponde a un buen conocedor de los entresijos de Euskal Irrati Telebista y viene a descubrir las dificultades en la gestión del ente público durante el último año, el primero con el equipo de Alberto Surio al frente. Un ejercicio en el que la nueva dirección ha tenido que superar la dificultad de tomar las riendas de un medio que, desde su nacimiento hace tres décadas, había estado dirigido por destacados miembros del PNV, afrontar el pulso con un sector de la plantilla muy próximo a Sabin Etxea y sufrir una importante caída en la audiencia, fruto en parte de la entrada en funcionamiento de la TDT, que ha llevado a ETB-1 y ETB-2 a mínimos históricos. El canal en euskera ha bajado de mayo de 2009 al pasado mes del 3,4% al 2%, mientras que el de castellano experimenta su peor registro desde que hay mediciones y pasa del 14,7% al 9,5%.
El actual director general fue nombrado por el Parlamento el 18 de junio de 2009, hará un año el próximo viernes. La designación suponía ya un importante cambio respecto a sus predecesores. Surio era un periodista en activo -de 'El Diario Vasco'- no afiliado a ningún partido. Quienes habían ocupado el puesto hasta entonces pertenecían al PNV y abandonaron la dirección general del ente autonómico para proseguir con su carrera política. El último, Andoni Ortuzar, es ahora parlamentario en Vitoria y presidente de los jeltzales en Vizcaya, el territorio con mayor afiliación del partido.
La incorporación de Surio, rodeado de profesionales no ligados a ningún partido, pretendía rebajar el «sesgo nacionalista» de la anterior etapa y que los criterios «periodísticos» dominaran el día a día. Un cambio en la forma de trabajar que el grupo de directivos entrante reconocía que iba a requerir de un periodo de adaptación. El objetivo era abrir la cadena a los no nacionalistas después de décadas en las que «sólo se miraba a un lado» y «despolitizar» un medio que, para socialistas y populares, había vivido demasiado tiempo pendiente de «airear la doctrina del PNV» y con una «excesiva» presencia de la izquierda radical y el «entorno de ETA». La necesidad de un nuevo rumbo en EiTB apareció, incluso, en el pacto de legislatura que unió al PSE y al PP para llevar a Patxi López a Ajuria Enea.
El aterrizaje del nuevo equipo directivo de la radiotelevisión vasca no ha sido fácil. Primero, porque la crisis ha golpeado al ente público. De los 150 millones de euros que debía aportar el Gobierno vasco en forma de subvención directa la cantidad se ha rebajado en diez millones. Una cifra nada desdeñable en un medio caro, donde toda producción depende del presupuesto. Para el año que viene, esa cuantía irá a la baja, en consonancia con los recortes de la Administración autónoma. Como contrapeso, en los cuatro primeros meses del año, EiTB ha mejorado un 13% sus ingresos de publicidad, según Infoadex.
En lo laboral, el relevo en la dirección ha estado plagado de turbulencias. Surio y sus colaboradores intentaron abrir una etapa sin «revoluciones traumáticas» y han mantenido prácticamente el staff anterior, algo que sindicatos como LAB y Comisiones Obreras han 'afeado'. «Sólo han sustituido a la primera línea, a los grandes nombres. La segunda fila (de jefes) sigue siendo la misma», coinciden miembros del comité de empresa como Andoni Basabe o Rafa Herce, que creen que los nuevos responsables de la cadena debían haber dejado su impronta desde el primer momento. Consideran que los nuevos gestores han podido pecar de «falta de experiencia» porque, recuerdan, lo habitual en los relevos es «llegar con toda tu gente».
La entrada tranquila que pretendía el director general apenas tuvo tiempo de materializarse. Pronto comenzaron los roces en una redacción donde se ha extendido una creencia: tarde o temprano los nacionalistas volverán al poder y no sería descartable que pasaran factura a aquellos que colaboren y muestren cierto «compromiso» con los actuales responsables del ente. Con una plantilla superior al millar de empleados, más de 900 son fijos y permanecerán en el ente gobierne quien gobierne.
Y llegaron los conflictos. Primero, con la introducción de cambios de última hora en la escaleta de los 'Teleberri' y 'Gaur Egun' a espaldas de los máximos responsables, cuando éstos habían aprobado un orden diferente para las informaciones. La gota que colmó el vaso se registró en octubre pasado con el tratamiento que los servicios informativos de ETB dieron de la detención y encarcelamiento de Arnaldo Otegi. El lenguaje empleado y la excesiva presencia de declaraciones favorables a la izquierda abertzale no gustaron a la dirección. Aquel episodio provocó el cese de la editora responsable.
A continuación, presentó su dimisión la jefa de Política y, días más tarde, el de Economía. Tampoco gustó, esta vez entre la plantilla, cómo se abordó la absolución de los imputados en el 'caso Egunkaria'. En un principio la noticia iba a ocupar un espacio secundario en el informativo y tan sólo a última hora, después de cierto revuelo en la redacción, los máximos dirigentes de ETB optaron por abrir el 'Teleberri' con ello. La última revuelta ha sido un intento de sacar adelante una carta muy crítica con la dirección, que comenzó a repartirse internamente pero que no llegó a cuajar. En buena parte de la redacción tampoco ha gustado la parrilla de la nueva temporada porque se parece «demasiado» a la del resto de canales generalistas. «Y si vas a ver una copia, lo mejor es pasarse a ver el original», describe un empleado.
Para entonces, el nuevo equipo ya transmitía en privado un mismo análisis de la situación: aunque «se puede trabajar sin problemas con una mayoría» de la plantilla, existe un «foco» de trabajadores «muy beligerante», al que algunos vinculan directamente con Sabin Etxea. «Son pocos, pero con un objetivo muy claro: que se difunda una mala imagen y generar polémicas», asegura una fuente cercana a la cúpula directiva.
La pugna no sólo se ha sentido en el seno del ente público. También en el Parlamento, donde Surio ha tenido que comparecer en repetidas ocasiones, la mayoría a petición del PNV, que desde el primer momento advirtió que iba a estar «vigilante» sobre los nuevos gestores. Y no ha cejado en el marcaje al nuevo director general y a sus colaboradores más cercanos con críticas a la caída en las audiencias, reproches por, en su opinión, «alejarse de la realidad» de Euskadi y acusaciones de poner la radiotelevisión al servicio del PP en pago por su respaldo al lehendakari.
Caen las autonómicas
No todo han sido, sin embargo, malas palabras hacia la dirección. LAB y CCOO, los dos sindicatos consultados -ELA, mayoritaria en el ente, ha preferido no dar su opinión-, reconocen que el clima sindical ha mejorado respecto a la anterior etapa. Aunque el sindicato abertzale critica el veto que, a su juicio, se aplica sobre la izquierda radical, las dos centrales aseguran que el equipo de Surio muestra una mayor «receptividad» hacia las demandas para acabar con la precariedad laboral en la empresa. Al menos un 20% de los asalariados cuentan con una vinculación meramente eventual.
Los datos de audiencia tampoco han levantado el ánimo en la sede central de EiTB. El descenso ha sido imparable en el último año, si bien los dos canales llevaban desde comienzos de 2008 con una tendencia a la baja. Todo ello en un panorama en el que el 'apagón analógico' y la aparición de la televisión digital obliga a observar las mediciones con otros ojos. De una oferta de apenas una decena de canales, los hogares han pasado a disponer de la posibilidad de sintonizar más de una treintena, fragmentando los resultados.
En un año, ETB-2 ha caído hasta la cuarta posición en cuanto a los canales preferidos por los vascos, cuando hasta hace no demasiado pugnaba por hacerse con la primera posición. En porcentajes, también ha perdido. Del 14,7% de mayo de 2009 al 9,5% ahora. Mientras, el primer canal cayó del 3,4% al 2%. Una tendencia que en la casa justifican por la puesta en marcha de la TDT. Recuerdan que, a excepción de la catalana TV3, todas las autonómicas han retrocedido. Hasta el punto de que los canales asociados a la Forta han marcado en el último mes mínimos históricos con una cuota de pantalla en torno al 11% de media.
Una idea en la que abundan los responsables de la firma Barlovento, empresa especializada en la medición de audiencias. Javier López, gerente de análisis de la compañía, considera que estos datos son fruto de una «evolución lógica, natural, del mercado» tras el aumento de los canales a disposición del telespectador. «Las audiencias se han dispersado, de ahí todos estos mínimos históricos», reconoce. Y cita las caídas de las televisiones autonómicas de Galicia, Andalucía, Madrid y la Comunidad Valenciana. Los datos podrían ser incluso peores en el balance del próximo mes por el impacto del Mundial de fútbol de Sudáfrica recién comenzado.
La situación de las emisoras de radio es más peculiar. La más afectada por el cambio ha sido Radio Euskadi, que, según el EGM, ha perdido 50.000 oyentes. Miembros de la dirección han reconocido ante el consejo de administración que la bajada se debe al paso del presentador Xabier Lapitz a Onda Vasca. Por contra, Euskadi Irratia gana 14.000 oyentes y Euskadi Gaztea, 5.000.

EL CORREO 2010.06.13

Los expertos analizan para DEIA las claves sobre la pérdida de audiencias y la pluralidad del ente

EITB se convirtiera en un mapa del tiempo que reflejara los últimos doce meses, luciría un panorama invernal: muchas nubes, bastantes tormentas, vientos huracanados y algún que otro sol. En el debe y haber de este balance anual tienen cabida muchas variables que dejan traslucir diferencias en el recorrido del ente dependiendo de las audiencias de radio y televisión, las empresas del grupo o la programación. José Luis Lizundia, José María Gorordo, Juan Ignacio Pérez, Txema Ramírez de la Piscina, Andoni Basabe, Javier Estebanez, José Ramón Blázquez y Pedro Ruiz Aldasoro, entre otros, han valorado para DEIA la etapa de Alberto Surio y su equipo de gestores.

Poco público y parón veraniego

La primera parada del viaje remite a las audiencias. Preocupan, por lo bajas, en ETB-2 y ETB-1 en estos cinco meses y medio de 2010. La cadena ETB-3, sin embargo, ha experimentado una subida de cuota de pantalla tras la decisión de la actual dirección de trasladar la programación infantil a este canal. Resaltan la subida de las dos emisoras de radio en euskera, Euskadi Irratia y Gaztea, frente a la pérdida de clientela de Radio Euskadi.

Respecto al tratamiento informativo, mientras unos abogan por que no se releguen las noticias políticas, alguna voz señala que no es del todo malo restar tiempo a los temas ideológicos para cederlo a espacios más sociales. Pocos entran en aspectos concretos de la parrilla de programación de ETB-2, la más cuestionada, y se fijan más en los contenidos en general y las audiencias en particular.

Hay otros aspectos que no dejan tranquilos a los trabajadores del ente: aún no se sabe cuál va a ser la programación para los meses de verano en las emisoras de radio y en las cadenas de televisión. "Lo normal es que, a mitad de mayo, ya estuviera definida cuál va a ser la programación de EITB en su conjunto para julio y agosto. Este año no sabemos nada", señalan fuentes del ente.

Lo que sí se sabe es que, en estos momentos, la sede de Miramon sólo tiene trabajo de producción hasta finales de junio, y creen que en julio y agosto no se va a grabar ningún programa. En 2009 se aprovecharon estos meses para la realización de dos series, Euskolegas y Go!azen. Ninguna de las dos ha renovado temporada, a pesar de que la segunda se había convertido en un fenómeno mediático para los espectadores más jóvenes y ha ganado un premio de la Academia de Televisión como el mejor programa infantil de las televisiones autonómicas.

"Agresión Surio-López"

Las personas que han analizado la situación de los medios públicos vascos tienen, o han tenido, algo que ver con EITB. Todos están preocupados, en mayor o menor medida, por la pérdida de liderazgo de ETB-2 y el descenso acusado de ETB-1. En lo que va de año, el canal en euskera pierde siete décimas respecto al pasado, con el descenso del 3,2% al 2,5% de share. La segunda cadena pierde en un año casi seis puntos. Actualmente, la media anual es de 10,8%. Juan Ignacio Pérez, ex rector de la UPV y miembro del consejo de administración del ente, cree que hay hacer los análisis a más largo plazo: "A la hora de analizar las pérdidas de audiencia hay que ser muy rigurosos. No hay que hacerlas solamente de ETB: hay que analizar el resto de autonómicas y ver la cuota de pantalla en su conjunto".

Sin embargo, matiza: "Hay dos temas que me preocupan. Por una parte, la pérdida de confianza de la ciudadanía en los medios públicos, por la programación y la línea editorial. El otro es la repercusión que pueden tener esos descensos en los ingresos por publicidad. Hay que hacer estudios rigurosos, y la dirección no los ha hecho aún. Pero no se debe de analizar con recorridos tan cortos".

José Ramón Blázquez, consultor de comunicación, considera que "la mayoría de la audiencia se ha sentido humillada y, ante el espectáculo de la manipulación y la dolorosa demolición de un símbolo del autogobierno, que estaba por encima de las cuestiones partidistas, ha abandonado los medios de EITB". Según destaca, la pérdida del 36% de audiencia de ETB-2 y del 41% de ETB-1 radica en la "hipersensibilidad de la audiencia ante lo que entienden como una agresión de Surio-López" en el último año. Pedro Ruiz Aldasoro, productor de televisión, tiene otro enfoque a la hora de analizar la realidad de los medios públicos vascos: "Veo la situación como una ocasión perdida. EITB no aporta algo tan importante como es la tranquilidad a la audiencia y la tranquilidad a sus trabajadores. Empieza a competir en segunda división con Cuatro y La Sexta alejándose de los grandes grupos, donde antes sí estaba".

Símbolo de autogobierno

El balance que hace Txema Ramírez de la Piscina, profesor de la UPV, es igualmente duro. "No puede ser más negativo", recalca. También a su entender, las claves del batacazo habría que buscarlas en el "sectarismo escandaloso" y, como muestra, ofrece un botón: "Si hasta el PP quiere introducir el castellano en ETB-1, eso es una perversión absoluta". Sin embargo, resalta el aumento de audiencia por parte de Euskadi Irratia. "Es como una isla. Aunque se perciben los cambios, el componente humano ha conseguido mantener una pluralidad, al contrario de lo que ocurre en Radio Euskadi", precisa.

José María Gorordo, ex director general del ente, ve con preocupación la falta de proyectos por parte de esta dirección: "A pesar de que ellos llegaron con un gran apoyo mediático, en el que se hablaba de los primeros profesionales independientes, no tienen proyectos. A los cinco meses y medio, yo lancé ETB-2. También vulneran la Constitución en su artículo 20.3 al excluir a un sector de la sociedad. En este artículo se habla de que tiene que haber pluralidad hacia todos los grupos sociales. No habla de partidos".

Además, extiende esa pluralidad al respeto absoluto a las lenguas del Estado. En este sentido, señala que EITB está perdiendo su sentido al eliminarse las diferencias político-culturales que la han caracterizado siempre. "Las noticias más importantes son las del Estado. ¿Por qué compiten con las demás televisiones? Se creó como un medio para la construcción de un país. Si no es así, tiene el riesgo de ser sustituido por otro medio. Además, ETB-2 es la cadena que sustenta los ingresos por publicidad. No me vale la excusa de la fragmentación".

José Luis Lizundia, miembro del Consejo de Administración en representación de Euskaltzaindia, advierte, ante las críticas a la gestión y las audiencias, de que "hay que derribar la casa". Respecto a los contenidos informativos, señala que a veces puede ser bueno dejar de lado la ideología y dar otro tipo de noticias.

DEIA 2010.06.13